La transformación digital se ha convertido en una prioridad para las empresas de todo el mundo. De acuerdo con una encuesta de Forrester, el 93% de las compañías creen que deben adoptar la transformación digital para seguir siendo competitivas. Como resultado, las nuevas tecnologías y los procesos digitales son ahora algunos de los factores más importantes más valorados a la hora de crear una estrategia de negocios.
Sin embargo, la gran mayoría de estos proyectos acaban fracasando. Tal y como pudo comprobar Couchbase con una encuesta, el 81% de los intentos habían errado, sufrido un retraso importante, o perdido intensidad en el último año. Los bajos índices de éxito se deben, en gran medida, a haber planificado mal y a subestimar la escala del cambio. La tercera pata del problema es la falta de compromiso de los empleados.
Según IDC, en 2020 casi un tercio de las mayores empresas públicas del estarán dedicando al menos el 10% de sus ingresos a estrategias digitales. Sin embargo, la transformación no es una simple inversión en nueva tecnología. Esta también tendrá un impacto en todo la organización. De ahí la necesidad de adoptar una nueva cultura para triunfar. Es vital que los empleados se unan a la empresa desde el principio para mantenerlos comprometidos, motivados y eficientes. Pero, ¿cómo?
La comunicación es la clave del éxito en todo proceso colaborativo. Así, las empresas deben fomentar el diálogo abierto entre los empleados a todos los niveles antes y durante el proceso de transformación.
Para poder establecer canales de comunicación con los empleados y conocer sus opiniones y preocupaciones es imperativo asegurar su implicación. La construcción de una comunidad fomentará el aprendizaje común, permitiéndoles compartir enfoques, éxitos y fracasos. De esta manera toda la empresa puede beneficiarse de sus experiencias.
Los empleados también valorarán positivamente poder mantenerse informada. Y para ello se han de explicar tanto los motivos de la transformación digital, como sus objetivos y necesidades de colaboración. De acuerdo con McKinsey, las empresas que comunican una historia inspiradora así tienen más del triple de probabilidades de éxito en su transformación.
La satisfacción, a motivación y productividad de todo el equipo se pueden ver comprometidas si sus empleados no son capaces de utilizar correctamente sus herramientas digitales.
Lo más habitual es que no todos los empleados quieran participar en un primer instante. Para los que renieguen, la capacitación puede servir de ayuda a la incapacidad de adaptación. Los cuestionarios internos o entrevistas permiten identificar qué tipo de entrenamiento necesita cada uno. Valore también preguntar a los empleados qué tareas les gustaría digitalizar. Si sigue todo esto, de acuerdo con McKinsey, tendrás 1,4 veces más probabilidades de éxito.
Intente no olvidar que de los errores también se aprende. Hay que fomentar la experimentación y no castigar el fracaso. Cree un ambiente de confianza que permita a los empleados aprender sin miedo.
Para ganarte de verdad a los empleados apuesta por mostrarles con pruebas cómo su trabajo será más sencillo y satisfactorio con el uso de las herramientas digitales.
La digitalización supone una revolución para la estrategia de gestión de datos. Para los empleados supone ser más eficientes al poder localizar la información que necesitan de forma instantánea. El uso correcto de las herramientas por parte del equipo será beneficioso para toda la organización. Los niveles de satisfacción y motivación se dispararán, y por ende, aumentará la productividad y el éxito empresarial.
Otra estrategia para mejorar el compromiso pasa por alinear objetivos empresariales con objetivos personales. Algunas empresas optan por conceder premios por buen desempeño a empleados o departamentos enteros. ¿El resultado? La transformación tiene más posibilidades de completarse exitosamente, al mismo tiempo que se reconoce la contribución de los empleados.
La transformación digital probablemente fracasará sin la implicación de los empleados. Es por eso que resulta imperativo involucrarlos desde el principio.
No basta con invertir en tecnología, sino que también se debe desarrollar una nueva cultura corporativa alineada con la era digital. Para ello empieza siempre por informar a los interesados sobre los motivos y caminos pactados para el proceso mediante la comunicación
No todos estarán receptivos, pero una comunicación y una formación eficaces ayudarán a resolver cualquier posible preocupación. Una vez asimilada la nueva tecnología y sus beneficios, los empleados se convertirán en la fuerza motriz que asegurará el éxito en tu transformación digital.
Los servicios de contenido y la nube son ingredientes claves de la transformación digital.